Slow Prison Life Capítulo - 9

El príncipe se entera del plan de la Noble Dama

Aquí un nuevo capítulo.... como verán Rachel es una mujer que habla de una forma muy críptica, que va de la mano con su alto intelecto... así que hay que releer sus diálogos para entender lo que quiere insinuar... en fin... ah y les recomiendo una nueva traducción que hago en strange translations, es  "There was no Secret Organization to Fight with the World’s Darkness so I Made One", esta muy buena...

Después de que la tetera empezó a hacer ruido encima del fuego de la lámpara, vertió el agua caliente en la tetera que ya contenía algunas hojas de té en su interior. Luego, volteando el reloj de arena, Rachel cubrió la tetera con un Tea Cozy antes de escarbar en una de sus cajas de madera.

“...¿debería comer galletas, o debería ir con pastel seco? Ese es el problema.”

Colocando el dorso de su dedo debajo de sus labios, Rachel comenzó a preocuparse... y hacia su bien presentada cara, la fría mirada del Príncipe Elliott se le adhirió.

“... Rachel. Ahora mismo, ¿¡hay algún problema!?”

“¡Mi Alteza! En esta etapa de la cocción al vapor, ¿hay algún otro problema más urgente?”

Habían pasado algunos días, y lo que Elliott vio cuando regresó a la prisión con la cabeza fría fue... Rachel preparándose elegantemente para la hora del té.

No importa cómo lo mires, ella no estaba reflexionando nada.

“De ninguna manera, ¿no tienes nada que decir?”

Hacia las palabras del Príncipe, Rachel puso su mano en su barbilla y pensó por un momento.

“...¡Ah! ¿Aún no he elegido una copa?”

“¿¡Por qué me importaría un error tan pequeño!?”

“No es bueno, la arena se ha caído mientras pensaba.”

“¡No pierdas el interés en la pregunta del príncipe! ¿¡No puedes escuchar bien!?”

Cuando llegaron los gritos de que ella ignoraba al Príncipe, Rachel sonrió alegremente mientras el olor de sus preparaciones le hacía cosquillas en la nariz, compartió un trozo de caramelo dulce de un solo bocado, probó un trozo de pastel de coñac cargado con muchas frutas secas, y suspiró placenteramente después de servir y beber una taza de su té recién hecho.

"Después de todo, nueces y bayas de té de león es lo mejor para pasteles de té....una gran respuesta.”

“.... Oye, gira hacia aquí si estás satisfecha. Bastarda, ¿hasta qué punto planeas ignorar los comentarios del Príncipe?”

Escuchando las palabras de Elliott mientras su tono se convertía en el hervor del magma, Rachel miró al Príncipe con su tenedor todavía en la mano. 

Rachel se tragó lo que tenía en la boca, erizando sus cejas, y luego señaló intensamente a Elliott con un extremo de su tenedor.

“¡Su Alteza... esa cosa del Príncipe, no debe permitir que sus ayudantes se burlen de usted por ello! Estos tipos groseros deben ser señalados intensamente, no llamados a ello. ¿Lo has entendido? ¿Se lo prometes a Onee-san?”

“Haaaaaaaaaah!?”

Mientras predicaba a su ex prometido con una cara presumida, Rachel se sirvió una segunda copa con su tarea hecha.

Hacia la inusual suposición que obtuvo en respuesta, Elliott quedó estupefacto... y luego, cuando sus sentidos volvieron a él, una vena azul apareció en su frente.

“¿Debería un prisionero estar haciendo un estilo de vida para sí mismo en el que pueda parlotear una línea tan extremadamente elegante de sinsentido…Ah!?

“¡Bueno! Quiero que sepas que estoy bien despierta. Aunque estuviera hablando dormida, entonces Su Alteza solo fue suficiente para despertarme.”

Rachel regreso cada comentario.

“¡Ya basta, bastarda! ¿¡No sólo has intimidado a Margaret desde las sombras, sino que ahora tontamente te niegas a reflexionar sobre tus acciones como una idiota...!?

“¡Eso es! Completamente, mientras estoy encerrada en una prisión, ¿por qué tengo que seguir haciendo de hombre recto para cada cosa que dice Su Alteza? ¿Por qué la carga de la desgracia del Príncipe es puesta sobre un prisionero? ¿Esto está bien? Estar atento a las palabras y cosas apropiadas para la posición de Su Alteza, ¿no debería tener más cuidado con lo que les rodea?”

“Eh!? Lo siento... hm?”

... Había algo mal en el razonamiento de Rachel.

Fue por aquí que Rachel se las arregló para terminar su tercera taza de té, y Elliott se dio cuenta de que Rachel lo había persuadido para que encontrara la culpa en sí mismo.

“Espera, ¿no es sólo tu malentendido?”

“¿No es tu reacción un poco lenta?”

“¿No puedes callarte? ¡Esto es sobre ti! Encarcelado en una mazmorra subterránea, ¿no se te ha enfriado un poco la cabeza?”

Elliott estaba señalando con el dedo a Rachel mientras gritaba.

“¡Cómo se supone que una joven hija de un Duque va a soportar esta oscura y húmeda mazmorra subterránea! Ya han pasado diez días desde que te empujé aquí. ¿De qué manera ha hecho los preparativos para hacer de esto algo más que una residencia temporal? Incluso si alardeas de tu valentía, ¿¡no estás solo haciendo ruido!?"

La persona que tenía todo esto dirigido a ella comentó que el té era bueno, y dejando el té como si fuera un hombre no muy sabio, se hundió en los suaves cojines de su sofá y abrió un libro. Mirando la portada, parecía ser una revista que reunía una serie de fotos e historias de moda. 

Elliott fue completamente ignorado y no recibió respuesta. Parece que estaba un poco oscuro en ese momento, y ella subió un poco la lámpara de su mesa.

“¡Oiiiiiiiii!”

“Algunas personas no pueden mantener la calma.... cuando alguien está leyendo un libro deberías estar callado, ¿no te han informado nunca de ello los responsables de tu educación?”

“¿Nadie te ha dicho antes que escuches lo que la gente dice hasta el final y que no vayas a hacer otra cosa...!?”

“Si es así, todo está bien. Desde el principio no te estaba escuchando.”

“¿Cómo es que te las arreglas así?”

Con su libro todavía abierto, Rachel miró a Elliott.

“Su Alteza.... ¿qué ve de mi vida aquí que me haga levantar ruido?”

Elliott intentó mirar dentro de la prisión.

Se colocó una alfombra gruesa con un diseño geométrico para que no entrara en contacto con el suelo frío y duro.

Mientras pensaba en tomar asiento, había un sofá acolchado que sería impropio para él debido a su posición como príncipe.

Claramente las primeras tazas de té fueron hechas con hojas de té de lujo. Además, una lámpara que nunca parece quedarse sin líquido a pesar de que se usa constantemente.

Cualquier fallo en el contenido podía dejarse al azar, ya que también había algunas exquisiteces extranjeras en conserva que se almacenaban para las comidas.

Pero no puede marcharse, lo que la obliga a soportar este entorno deprimente, es una vida a la altura de un aristócrata pobre y de clase baja. 

Y Elliott adivinó eso en estos últimos diez días... esta mujer es una hikikomori.

“Ja, ja, ja, ja, ja... parece que estás disfrutando bastante de esta mazmorra.”

“¿Verdad?”

“¡Sin embargo! ¿No sabes que el mundo avanza mientras estás atrapada en este lugar? Para ti, con tu gran orgullo, disculparte sería una humillación, pero ¿no es mejor pensar en los méritos y deméritos de permanecer en prisión?”

Mientras los ojos de Elliott la miraban hacia abajo mientras intentaban demostrar su punto de vista, Rachel había vuelto a hojear silenciosamente su revista.

“Bueno, he considerado los méritos y deméritos apropiadamente.”

“¿Oh?”

“Ciertamente no puedo salir cuando quiera, y seguramente seré dejada atrás por el flujo del mundo.”

“Ves, así es!”

“Pero.”

“Hm?”

Mientras Elliott ponía una cara dudosa, Rachel estaba como siempre manteniendo los ojos pegados a su revista y hablaba con voz suave.

“Mientras permanezca en la mazmorra, entonces el abandono de nuestro compromiso sigue siendo válido. Por lo tanto, no tengo que participar en la educación de reina. Eso implica que todos los profesores responsables no hacen nada todos los días. Si el abandono de nuestro compromiso por parte del Príncipe se cancela cuando salga de esta prisión, entonces seré inmediatamente recogida por la oficina de educación. No es una broma. ¿Debería arriesgarme con tal peligro?”

Mientras Rachel hablaba, Elliott intentó pensar. Conocía a los maestros a cargo de la educación de reina de Rachel. Cuando era pequeño, le regañaban continuamente porque estaba aburrido y trataba de huir de su entrenamiento espartano... no, tal vez sería mejor decir que hacían uso de la fuerza para tratar de hacer que su príncipe actuara como un príncipe.... Nunca había visto a Rachel recibiendo la educación de reina, pero conocía las caras de los maestros, y podía imaginar cómo eran las clases.

No hay libertad de acción, no hay manera de pasar el tiempo como te gustaría, y mientras estás atascado en un escritorio estrecho tienes a un número de profesores ladrando como un gran número de perros rabiosos. 

Elliott se preguntaba qué sería mejor...

Sykes estaba observando la condición de los caballos en el establo cuando vio a Elliott caminando desde el patio trasero.

"Su Alteza, ¿acaba de volver de visitar a Rachel?”

“...Ah.”

Sykes ladeó la cabeza al ver a Elliott en un estado en el que parecía carecer por completo de energía y comenzó a limpiar después de haber terminado de cepillar a los caballos.

“¿Cómo fue eso? ¿Viste a Rachel mostrar una pequeña reflexion?”

“....No, de alguna manera...no ha reflexionado nada...en este caso, no lo hará.”

“¿Eh?”

Sykes estaba cada vez más preocupado por el comportamiento apático de Elliott, pero fue entonces cuando George vino corriendo desde el palacio.

“¡Bien, te encontré! ¡Su Alteza!”

“George”

“Oh, George. ¿Qué pasa?”

La complexión de George mientras venía corriendo se veía mal, y aunque al principio pensaron que estaba sin aliento por correr de esta manera, no parecía ser así.

“¿Pasó algo?”

Cuando Elliott preguntó, George comenzó a mover la cabeza vigorosamente como un pájaro carpintero.

“En la oficina de Su Alteza, no estaban convencidos del encarcelamiento de mi hermana...”

George comenzó a hablar a regañadientes mientras su aliento de dolor rompía intermitentemente sus palabras mientras Sykes le acariciaba la espalda.

“Ja.... ¿es eso cierto?”

Elliott suspiró.

Hasta ahora había otros, cortesanos y aristócratas, que no podían ser convencidos y afirmaban que las acciones de Elliott eran por capricho y que sus convicciones eran inválidas.

“Bueno, no se puede evitar. Iré a discutir con ellos directamente. ¡Vamos!”

Elliott trató de recuperarse y se dirigió de nuevo a su oficina.... cuando a su espalda, George tiró información adicional de su garganta reseca.

“La duquesa Somerset y las otras señoras a cargo de la educación de mi hermana se han desbordado.... siguen gritándole a todo el mundo con voz chillona, y estamos luchando para responder!”

Los pies de Elliott se detuvieron por completo, y después de hacer un espléndido giro de 180 grados en el lugar, volteo hacia Sykes y George.

“¡Bien, vamos por una larga distracción!”

“¿Eh!? Eso, la gente que vino a protestar...”

“¿Te vas ahora?”

“¡Aunque el sol se ponga pronto!”

“¡No te preocupes! ¡Olvidaremos todo mientras dejamos que los caballos corran! ¡Queeeeeeee, si el sol se pone, podemos quedarnos afuera en la villa!”

Elliott se unió al lado de sus dos ayudantes, y corrió en los caballos hacia los suburbios a medida que el sol en el horizonte comenzaba a ponerse más rojo.

“Su Alteza.... aunque corras, ellos vendrán de nuevo...”

“¡No estamos huyendo! Solo por casualidad, ¡en realidad nos escabullimos en nuestros caballos, por casualidad!”